(Respira hondo) Oh si... Es esa brisa verde la que me conmueve con un ímpetu que mi pecho enciende. Está ahí, allí de frente, derramando su rocío por los rosales con su tono fragante, despertando al aquelarre, al gallo que viene observando los tempranos albores del paraje.
Así bajo tu luz, arropadme, arropadme bajo ése velo que lleváis tramando desde el Este, contadme el secreto que os hace salir de la montaña tan valiente, tornando la cúpula de un cobrizo de piel celeste.
No dejéis que la Luna se haga pregón de mis desvelos en la noche, e inmortalizad vuestro recuerdo desde hoy para siempre. Que no se me olvide de lo bien que la humedecida tierra huele, ni tampoco lo florido que ahora luce el valle.
> Mike: "¡Así tan de repente! Un caracol emerge escalando por mi frente ¡Hey amigo! ¿Qué hacéis aquí por mi cama tan libremente?"
Dos alargados ojitos me miraban parecían estar tramando algo que contarme
> Caracol: "¡Ay descuidado humano! Ave sin pico, gallo sin canto, el lobo sin Luna y sin uñas el gato no podrían vivir más de dos años."
>Mike: (Confundido) "¿Eh? ¿Qué queréis decir?"
> Caracol: (Suspira y se rasca el caparazón) "Que la lluvia ha cesado y el nuevo día ha comenzado, y vos ahí aún retozando bajo el Sol y murmullo de los pájaros...
Sobre una nube voy leyendo tras largas horas sin tener en mente un proyecto, estoy aquí arriba atrapado con un destino incierto. Lo único que se me ocurre hacer y puedo es observar cómo la lluvia aclara el color del nublo que pasa bajo su tupido velo.
(Asustado, observa como las nubes se disuelven) Esperad un momento... ¿Que se aclaran los cirros con esa lluvia? ¡Pero si lo único que llueven son copos de nácar y azúcar! Entonces la nube sobre la que estoy ahora... Oh no... Debo hacer algo (Se va acercando su nube a la lluvia)
(Pensativo, nervioso) ¡Piensa, Mike piensa! Veamos… Arcoíris a la distancia peinan el cielo dejando auroras a la vez que la lluvia devora las nubes y las evapora. Teniendo en cuenta cómo de rara es esta zona y partiendo de que es un sueño en el que nada se arriesga…
¡Qué demonios! Probemos (Se lanza sobre un arcoíris, lo agarra y se balancea como en una liana) ¡Já! ¡Funciona! (Suelta una carcajada sin percatarse de lo que hay al frente)
>Ave: (Aparece) ¿Te has perdido?
>Mike: ¿Eh? ¿Tú otra vez?
>Ave: Mejor mira lo que tienes delante (Se va)
> Mike: ¿Eh?…. (Choca con una pelota gigante de goma, rebota y sale despedido)
>Mike: ¡Aaah! ¿Es que nada puede ser coherente en este sitio? Confundido, aturdido y ahora…con rumbo a otro sitio. La próxima vez pensaré antes si debo dormir temprano. (Aterriza en una loma con un espeso forraje)
No puede ser que después de tal caída aún siga vivo. Este prado de largas matas, tiene un color extraño, es así como de un marrón con un lunar anaranjado, se siente suave como cabello aterciopelado. Puede que me abrigue con él si es que aquí llega el crepúsculo. (Tira arrancando un poco, se oye un estruendo)
¡¡¡Meow!!! (A la loma le salen ojos de gato y gigantescas uñas surgen donde había un árbol) >Mike: Será mejor salir corriendo.
Mike Ryman.
Un Sueño Interminable (Parte 1)
(Se despierta sobresaltado) > Mike: ¿Qué hora es? Será que caí dormido a una hora que no he conocido fruto del desvelo en el que la noche me ha tenido. Ahora estoy confundido, ya no se ni por dónde he venido...
(Un grupo de elefantes pasa frente a él empujando un carruaje)
Pero ¿Qué demonios está ocurriendo? Juro que tal locura no había visto. Un carruaje en mitad del bosque tirado por... ¿Elefantes? ¿En Inglaterra? (Se pellizca y sigue andando)
Debo estar aún soñando o peor, que me haya vuelto loco. ¡Por todos los santos! ¿Es que no tiene fin este sendero? Parece que ando en círculos pues juro que he visto antes el mismo árbol
(Un ave con cabeza de pez se posa frente a él, mirándole fijamente) Ajá, ya claro. Muy imaginativo. Debe ser que algo en mal estado he comido y alucinaciones estoy teniendo (Se ríe) Pronto me arrastrará la vida a estar despierto, tan sólo tengo que esperar que me reaccione el cerebro.
>Ave: ¿Os habéis perdido?
>Mike: ¡Ahhh! (Cae al suelo de espaldas) ¿Qué sois bestia inmunda?
>Ave: Cuidado por donde pisas.
>Mike: ¿Eh? (Mira a su alrededor y comienza a hundirse en el suelo) ¡Esto es el colmo! Ni descansar un segundo puedo, pues parece que a sucumbir estoy condenado. Este sueño juega conmigo como vulgar payaso
(Se hunde y cae en la oscuridad) ¿A dónde voy ahora que la nada veo? Precipitado a lo desconocido está mi cuerpo, seguro que al acabar el abismo me despierto
(Atraviesa a una luz blanca y muy radiante, cayendo sobre una nube. Se levanta y se ve inmerso en un cielo azul, lleno de nubes blancas como el algodón)
Genial ¿Ahora qué?
Mike Ryman.
El Poeta y el Sastre
Mientras tanto en una sastrería…
>Sastre: (Frotándose las manos) ¡Buenos días! ¿En qué le puedo ayudar?
>Poeta: (Con la mirada al frente y muy dispuesto) ¡Lucero que ríe cruzando el horizonte! No se extrañe que el faro reclame la belleza que os cubre y que me enamoró por la noche. (Levanta la barbilla con gesto triunfal)
>Sastre: (Nervioso) ¿Disculpe? ¿Necesita que le cosa algo?
>Poeta: (Tira un puñado de pétalos al aire y prosigue en éxtasis) Haz que sus olas en sierpes de colores tornen con piel de estrellas que a los corales canten. Haz que el amargo camino que detrás se cierne quede ahogado en llanto para siempre, volviendo lo que se extiende ahí delante en algo cálido, bello y muy brillante… (Con las manos se cubre el rostro con gesto dramático)
>Marie: (Riendo) No, pero es más divertido que tú (Se va)
>Sastre: (Indignado) ¡Señor, por favor! ¿Qué es lo que quiere?
> Poeta: (Mirándole fijamente) ¡La crueldad de sus gestos la sangre hiela! Por favor… Deme un traje que sea de pena que me abrigue más al oír su queja.
> Sastre: ¡Ah! (Embolsa un traje) ¿Algo más? (Sonríe)
>Poeta: ¿Hacen descuento si me incluye corbata?
>Sastre: Me temo que no. Que tenga un buen día.
(Sale el poeta)
>Sastre: (Suspira) Estos poetas de hoy en día ya no saben lo que quieren.